Bienvenidos

Situada a solo 20 min del centro histórico de la ciudad de Mérida, capital del estado de Yucatán, México, y en la cercanía de los més hermosos sitios arqueológicos mayas, (Chichén Itzá, Uxmal, etc.). Esta hermosa hacienda del siglo XVII le revelará los encantos de su pasado y de su encantador entorno lleno de paz y tranquilidad.

Podrá disfrutar del mejor servicio y “Savoir faire” del restaurante gourmet francés/criollo ubicado en la antigua “Casa de máquinas”.

Hospitalidad, encanto, tranquilidad en un ambiente exótico. Encuentro de la cultura yucateca y francesa en un lugar de ensueño.

Descripción

La Hacienda Santa Cruz empieza su historia en 1640. En aquellos tiempos, era un monasterio de monjes franciscanos, los cuales vivían en la parte más antigua de la hacienda "La casa principal".

Más adelante funcionó como propiedad agrícola, una finca. Cuando empezó el fuerte, impulso de las zonas henequeneras, se transformó en hacienda con el fin de cultivar y procesar el famoso "Oro verde" de Yucatán, el Henequén.

Siguió con su actividad henequera durante unos 200 años, después de los cuales, debido a la llegada de las fibras sintéticas inundando los mercados, sufrió, como la mayoría de las haciendas de Yucatán, las perdidas de ventas. Después de eso y hasta finales del siglo XX, regresó de nuevo a su actividad agrícola.

La hacienda tiene una extensión de 7 hectáreas con varios edificios, extensos jardines y vestigios de antiguos edificios. Todo rodeado de muros de piedra y a la sombra de grandes árboles.

La Casa Principal

La casa principal consiste en cinco cuartos amurallados (suites y dobles) con paredes de piedra de 1.80m de espesor. Corredor que da entrada al cuarto, con su arco muy alto y piso de piedra, el cual permitía la entrada de caballos. Se puede ver todavía los aros de hierro forjados empotrados en la fachada de este edificio.

La Casa de Máquinas

El edificio más importante de la hacienda ha sido construido al final del siglo XVIII cuando era una de las más importantes haciendas henequeras. En esa época la casa de máquinas estaba llena de enorme maquinaria que transformaban las espinosas hojas del henequén en fibras que luego se convertían en cuerda de sisal. Estas fibras se transportaban en carritos y se mandaban por trenes a Sisal ubicado en el golfo de México. De ahí se enviaba alrededor de todo el mundo y por eso se le quedo el nombre de "Sisal".

Hoy día en la casa de maquinas se encuentran el bar, la gran sala y la recepción, por la cual se accede a través de una escalera circular a una biblioteca, luego se atraviesa un patio con fuente y peces, para llegar al comedor.

Los 11m de altura de los techos con vigas dan una idea de la grandeza de antaño. Una terraza con piso de piedra y de columnas se ubica en todo lo largo del edificio, con vista a una huerta sombreada.

En seguida de la terraza, subiendo unos escalones, se accede a la hermosa piscina dominada por la enorme chimenea que queda como monumento, y además, puede observarse desde cualquier parte de la hacienda.

La Capilla

Cuando el huracán Gilberto golpeo el área de Mérida en 1988 mucha gente del pueblo la utilizó de refugio. Aunque el huracán causo graves daños en la hacienda, y el techo de la capilla se desplomó meses después, ninguna persona que buscó refugio esa noche salió herida. Una nueva iglesia fue construida para el pueblo afuera de la hacienda, pero la gente guardó siempre especial afecto por la antigua capilla, la cual está actualmente restaurada.

La viga esculpida que soportaba el antiguo techo fue rescatada e instalada por un artista local, Alberto Castillo. La capilla fue resantificada y ocasionalmente se celebran misas, bautizos y bodas.

La Tierra y sus Habitantes

Las 7 hectáreas de la hacienda están rodeadas de un viejo muro de piedras y la vida alrededor continúa. Cuando la producción del henequén tomo su fin a mediados de los 50’s, los dueños se mudaron a Mérida. Durante las 3 décadas siguientes, la hacienda se dedicó a cultivar frutas y producir aves de corral a pequeña escala.

Sin embargo los esfuerzos cesaron después del huracán Gilberto, y la hacienda fue totalmente abandonada en 1988.

El sistema de irrigación en piedra tallada quedo deteriorado y la tierra regresó a su estado natural y así, felizmente para todos, los pájaros y fauna regresaron.

Ahora los nuevos dueños alientan la flora y fauna, habiendo un sin fin de especies de pájaros y flores.

Facilidades

La "Casa de máquinas" restaurante con terraza, piscina con bar, una terraza y un patio con fuente en el corazón de la hacienda.

La capilla que abriga una sala de juntas equipada para recibir sus conferencias, seminarios etc.

La "Casa principal" que alberga espaciosas y confortables suites.

La ubicación no podría ser mejor, La Hacienda Santa Cruz está localizada lo suficientemente retirada del movimiento y ruido de la ciudad para sentirse en paz y tranquilidad, pero con la conveniente cercanía de comercios, centro de la ciudad, sitios recreativos, etc.

Recorrido desde el Aeropuerto:

En la salida del aeropuerto, doble a la izquierda sobre la avenida Itzaes, siga las señales hacia Campeche, Uxmal, tome la desviación a la derecha sobre el puente que lo lleva al periférico, siga hasta la salida a Dzununcán (Segunda salida), en la salida doble a la derecha. Usted verá enseguida la señal que le indica Santa Cruz Palomeque. Siga la carretera hasta que entre al pequeño pueblo (aprox. 1.3km). Enfrente de la iglesia y parque de juegos, podrá ver el portón de entrada de la hacienda a su izquierda.

Direcciones desde Cancún:

Siga la carretera o la ruta marcada hacia Mérida. Mérida estará todo derecho. Siga las señales hacia Campeche, Uxmal. Esto le pondrá sobre periférico. Continúe sobre la carretera hasta que vea las señales para salir a Dzununcán(Segunda salida), en la salida doble a la derecha. Usted verá enseguida la señal que le indica Santa Cruz Palomeque. Siga la carretera hasta que entre al pequeño pueblo (aprox. 1.3km). Enfrente de la iglesia y parque de juegos, podrá ver el portón de entrada de la hacienda a su izquierda.